Foto: Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República.
El Instituto Politécnico Nacional (IPN) se encuentra a la zaga en cuanto a la generación de patentes y su utilización en México, pues durante la gestión panista sólo obtuvo 6 patentes en 2010 y ninguna en 2011, de acuerdo con datos del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), señaló Octavio Paredes López, Investigador Emérito del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN y aspirante a dirigir el Politécnico para el trienio 2012-2015.
“Además de generarse, el conocimiento se aplica y protege. Por ello, las patentes son un buen indicador de la creatividad y la capacidad de articular ideas innovadoras”, afirmó Paredes López, Premio Nacional de Ciencias y Artes 1991 en el campo de Tecnología y Diseño. “Esto demuestra que el conocimiento y la habilidad para usarlo han merecido una muy pobre atención en la administración actual, por lo que su reestructuración y apoyo son una de las grandes tareas pendientes e impostergables en la siguiente administración”.
El Politécnico es superado por instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México, el Instituto Mexicano del Petróleo, el Cinvestav-IPN, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, la Universidad Autónoma Metropolitana y el Centro de Investigación en Materiales Avanzados, por lo que el científico galardonado dos veces con la Presea Lázaro Cárdenas (máximo reconocimiento politécnico y único con esta doble distinción), se compromete a llevar a la institución a la cabeza de las patentes en México, y a propiciar su empleo, en caso de ser elegido como su Director General.
En México se patenta poco, ya que de 9 mil 925 patentes otorgadas en el país durante 2012, sólo 224 son de mexicanos, esto es el 2.25%, de acuerdo con datos del IMPI hasta el mes de septiembre de 2012.
“Donde hay poco nuevo conocimiento hay poco crecimiento económico”, subrayó Paredes López, también Investigador Emérito del Sistema Nacional de Investigadores. “Este indicador no corresponde con la responsabilidad histórica del IPN, ni con su naturaleza tecnológica, ni con la capacidad de inventiva de su comunidad”.
De acuerdo con el IMPI, en 2012 se otorgaron en nuestro país 842 patentes a empresas o ciudadanos alemanes (8.48%); 4 mil 781, a estadounidenses (48.17%); 460, a franceses (4.63%); 625, a japoneses (6.3%); 253, a ingleses (2.54%); 610, a suizos (6.15%); y 2 mil 130, a ciudadanos o empresas del resto del mundo (21.46%). Estos datos dan a México un coeficiente de inventiva de 0.09 solicitudes de patentes por cada 10 mil habitantes.
En tanto, el informe Perspectivas de Ciencia, Tecnología e Industria de 2012 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), ubica a México en el lugar 40 de 43 países analizados en cuanto al número de patentes, por arriba sólo de Colombia (41), Egipto (42) e Indonesia (43) y superado por naciones de similar desarrollo como Turquía (37), Chile (36) Brasil (33), Grecia (32), India (31) y Sudáfrica (30); y por debajo de todos los países miembros de la OCDE.
Por otro lado, Paredes López manifestó que el IPN no figura en los diversos rankings internacionales de universidades como consecuencia del bajo rendimiento innovador de las últimas administraciones panistas. Por ejemplo, en el prestigioso Times Higher Education de Thomson Reuters se ubica sólo a una universidad mexicana dentro de las primeras 400 del mundo en 2012: la UNAM; y lo mismo ocurre con elQSTopuniversities o el Academic Ranking of World Universities de la Universidad Jiao Tong de Shanghai, China.
En el único ranking donde figura el Politécnico es el Ranking Web de Universidades o Webometrics, donde ocupa la lejana posición número 659, superada por la UNAM que se localiza en el sitio 41; la Universidad de Guadalajara, en el 576; y la Universidad Autónoma Metropolitana, en el 651.
Para el ex presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, Doctorado Honoris Causa de universidades mexicanas y extranjeras, el IPN debe recuperar su papel como institución rectora de la educación tecnológica, “pues sólo así se podrá ubicar entre las 100 primeras instituciones de educación superior a nivel mundial. Éste es otro de los retos que asumiríamos”.
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