La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) informó que de 2005 a la fecha ha recibido más de 27 mil quejas por presuntas violaciones al derecho a la salud de la población, un promedio de tres mil 857 denuncias anuales y 325 por mes.
Por lo que Raúl Plascencia Villanueva, Ombudsman nacional, considera que el acceso de la población a los servicios de salud de calidad es fundamental para contribuir a la consolidación de los derechos humanos en nuestro país.
La protección de la salud es un derecho establecido en la Declaración Universal de Derechos Humanos que, en su artículo 25 hace referencia a que toda persona, sin distinción alguna, tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, tanto a ella como a su familia, condiciones para mantener y cuidar su salud, como el acceso a servicios médicos.
El artículo cuarto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos garantiza este derecho y pone énfasis en la niñez, como lo indica el artículo 28 de la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; destaca que los tres ámbitos de gobierno deben trabajar coordinadamente para garantizar ese derecho a los menores.
Algunos de los objetivos de esta labor conjunta son: reducir la mortalidad infantil, asegurar la asistencia médica y sanitaria para la prevención, otorgar tratamiento y rehabilitación; combatir la desnutrición mediante la promoción de una alimentación adecuada y fomentar los programas de vacunación.
En México, según cifras oficiales, 98.4 por ciento de los 32.5 millones de niñas y niños de 1 a 14 años de edad tienen acceso a servicios médicos; 31.8 por ciento en instituciones públicas como el IMSS o el ISSSTE; 24.9 por ciento en instituciones privadas y 43 por ciento son usuarios de programas gubernamentales dirigidos a personas que carecen de seguridad social.
Este Organismo nacional autónomo, mediante el Programa de Asuntos de la Niñez y la Familia, promueve entre los menores, padres de familia, servidores públicos y sociedad en general los derechos humanos de niñas y niños desde una perspectiva de género y del interés superior que representa la infancia, con la finalidad de fomentar una cultura de conocimiento y respeto de estos derechos.
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