Foto: Bolsa Mexicana de Valores
A tres años del cierre de Mexicana de Aviación, trabajadoras pensionadas de la empresa exigieron el pago de lo que se les adeuda, y advirtieron el gran desgaste físico y emocional que padecen con el alargamiento del conflicto.
La falta de cumplimiento de la empresa para darles el dinero que les corresponde tras 30 años de trabajo, las nulas oportunidades para emplearse en otras empresas por pasar de los 50 años de edad, y el nulo apoyo por parte de sus familias, han provocado que las y los trabajadores de la aerolínea caigan en depresión, informó Dulce María Mejía, sobrecargo jubilada de Mexicana.
En entrevista frente al plantón que mantiene junto con personal jubilado desde hace 60 días en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), la trabajadora dijo que su salud física y emocional disminuyó considerablemente, ya que no cuentan con servicios médicos ni la solvencia económica para pagarlo.
Incluso recalcó que su estado físico disminuyó a raíz de la huelga de hambre que sostuvo por 10 días en marzo pasado, la cual fue levantada tras el compromiso de Mexicana de pagarles los tres años que les adeuda de salarios, sin embargo ante el incumplimiento decidieron montar el pasado 1 de julio el plantón permanente.
Y aunque sólo hay especulaciones sobre un potencial inversionista interesado en comprar la empresa, Mejía dijo que sabe que a los únicos que han llamado para firmar su renuncia y liquidarlos es a los trabajadores que estaban en activo hasta el 28 de agosto de 2010, pero a las y los jubilados nadie se ha acercado, acusó.
Incluso explicó que las aerolíneas Iberia, Volaris, Interjet y LAN Chile usan la base de mantenimiento de Mexicana, lo que sin duda ingresa dinero a la empresa, y el cual es resguardado por la juez del concurso mercantil, Edith Alarcón.
Además señaló que ya tuvieron acercamiento con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), para conocer el monto real del fideicomiso que lograron juntar las y los trabajadores, el cual se especula ascendería a 82 millones de pesos, cifra que para Mejía es “errónea”.
=LOA=
(CIMAC)
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