Foto: B20.
Una de las lecciones que América Latina aprendió de sus crisis pasadas y que ahora puede compartir al mundo para enfrentar los desafíos de la recuperación global es que es necesario avanzar hacia políticas más flexibles que permitan reducir los costos de los ajustes económicos, aseguró el presidente de Chile, Sebastián Piñera.
Al participar ayer en representación de los líderes del G20 en el panel final de la Cumbre B20, el presidente chileno expuso que el mundo “no está preparado para vivir siempre tiempos de bonanza”, por ello, explicó, es importante flexibilizar las políticas públicas –principalmente en materia laboral– con el fin de que los ciudadanos paguen un menor costo durante las crisis.
Como está el sistema actualmente, abundó, los ajustes en el mercado laboral se dan a través de su expresión más dramática: la pérdida de empleos, cuando sería posible atemperar este impacto si se logran acuerdos para dotar de capacidad de adaptación a los mercados laborales.
“Es necesario tener mercados más flexibles, que cuando haya crisis se puedan corregir el tiempo de las jornadas laborales, los salarios, pero que se mantenga el empleo y el ingreso, que no sea el desempleo el que ajuste”, refirió.
En una conversación con el actual presidente del B20, Alejandro Ramírez, Piñera expuso que las pequeñas y medianas empresas son las que tienen la mayor capacidad de generar empleos “y las reglas laborales deben reconocer la particular situación de las pymes, porque las reglas actuales pueden parecer normales para las grandes empresas, pero pueden ser asfixiantes para una pequeña empresa”.
Luego de celebrar el esfuerzo de articulación del B20, el mandatario chileno destacó que es muy importante fomentar la incorporación de los jóvenes al mercado laboral y lograr la integración de las pequeñas empresas a las cadenas productivas de las grandes empresas.
Finalmente Sebastián Piñera hizo un amplio reconocimiento a Alejandro Ramírez por su valiosa conducción del B20.
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