Los periodistas atrapados entre las amenazas del crimen organizado y la corrupción de las autoridades mexicanas pueden acudir ante instancias internacionales para demandar justicia, pero no lo hacen porque el gremio no ha dimensionando la gravedad de los ataques a la libertad de expresión.
Daniela Pastrana, directora de la Red de Periodistas de a Pie, dijo que si las y los informadores no acuden a tribunales internacionales como la Comisión y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, es porque se trata de un gremio que en el pasado “fue acariciado por el poder”, y apenas se descubrió víctima de los gobiernos.
A propósito del Día de la Justicia Internacional que se conmemora hoy como una forma de reflexionar sobre el papel de las cortes internacionales, la Red participó hoy en una mesa de análisis para evidenciar la impunidad en las agresiones, amenazas, ataques y asesinatos de periodistas.
Una muestra del golpeteo contra el gremio periodístico lo da el Centro de Comunicación Social (Cencos) en su informe “¿Por qué tanto silencio? Daño reiterado a la libertad de expresión en México 2012”, que destaca que durante el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012) las y los periodistas fueron blanco de agentes del Estado y del crimen organizado, al contabilizar 60 asesinatos y 15 desapariciones.
El informe también menciona que en 2012 se registraron 258 agresiones contra la libertad expresión que van desde difamaciones, ataques, injurias o presiones para no publicar información hasta asesinatos, siendo las entidades con más ataques el Distrito Federal, Oaxaca, Veracruz, Baja California y Michoacán.
Cencos reconoce que 27 por ciento de las agresiones fueron cometidas contra mujeres. En tanto, Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC) reportó 94 agresiones contra mujeres periodistas de 2005 a 2011, y reveló que de enero a abril de este año se han presentado nueve casos de violencia contra comunicadoras.
Daniela Pastrana refirió que las organizaciones civiles han trabajado favor de las y los periodistas desde que comenzaron a documentar las agresiones contra comunicadores, y lograron la promulgación de la ley que creó el Mecanismo de Protección para Periodistas y Personas Defensoras de Derechos Humanos.
Explicó que los periodistas son parte de un “gremio soberbio” que en su momento no se dio a la tarea de documentar las agresiones contra la libertad de expresión, y por tanto ahora no hay elementos suficientes para mandar estos casos ante instancias internacionales, lo que no significa que no merezcan estar en un tribunal regional.
“Hay ciertos casos concretos que si los hubiéramos documentado bien, si los compañeros hubieran denunciado a tiempo y si hubieran dicho lo que tenían que decir antes de que se pusiera todo como en Veracruz, hubieran llegado (ante mecanismos internacionales)”, advirtió la periodista durante el foro.
Apuntó que la impunidad reviste la mayoría de las agresiones, pese a que en México desde 2006 por acuerdo de la Procuraduría General de la República se creó la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión, que no ha dado resultados para resolver estos casos.
Cabe recordar que para que un caso sea aceptado por el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, la denuncia debe alegar violaciones consagradas en la Convención Americana, se deben agotar los procesos judiciales a nivel nacional, y el caso no debe estar en litigio ante otra instancia internacional.
=AGM=
(CIMAC)
Comentarios recientes