Diputados del PRI y PRD pidieron, por separado, que el gobierno federal reconozca que existe uso de tortura por parte de policías y elementos de las fuerzas armadas, como alertó Amnistía Internacional (AI), y, en consecuencia, la enfrente seriamente.
El diputado Ricardo Anaya Cortés (PAN) aseguró que erradicar la tortura no es sólo responsabilidad del Ejecutivo federal y llamó a todas las fuerzas políticas a confrontar dichos actos y promover sanciones más severas para quien la aplique.
Amnistía Internacional presentó el pasado jueves el informe “Culpables conocidos, víctimas ignoradas: Tortura y maltrato en México”, en el que asegura que éstos son prácticas sistemáticas y generalizadas que se han incrementado durante la administración del presidente Felipe Calderón.
En respuesta, las secretarías de Gobernación y Relaciones Exteriores expresaron el viernes, en un comunicado conjunto, el “pleno compromiso (de México) con la promoción y protección de los derechos humanos, en particular en el combate a la tortura y los maltratos”.
También señalaron que darán cuenta de sus políticas en la materia el 31 de octubre y 1 de noviembre, ante el comité de la ONU que supervisa la Convención contra la Tortura, a la que México se sumó en 1986.
La diputada Ana Isabel Allende Cano (PRI) afirmó este viernes que la tortura sigue presente en el país, “si bien hoy se denuncia con más firmeza por medio de asociaciones civiles”.
Dijo que combatir la corrupción e incentivar la participación ciudadana en la vigilancia ayudaría a atenuar el crimen, muchas veces perpetrado por los propios integrantes de los cuerpos policiacos.
“Hay que reconocer que existe el problema y hay que entrarle de fondo a una cuestión de capacitación y de valoración de quienes están involucrados en todo el sistema, de quienes son nuestros policías, nuestras autoridades, para que se puedan sobrellevar las cosas de mejor manera”, aseguró.
También dijo que hace falta legislar para cubrir vacíos legales y que las autoridades impartidoras de justicia cumplan con las normas de manera efectiva o, si no lo hacen, sean sancionados.
El vicecoordinador del grupo parlamentario del PAN, Ricardo Anaya Cortés, llamó a todas las fuerzas políticas al combate frontal que permita contrarrestar los actos de tortura, ya que -dijo- no es sólo responsabilidad del Ejecutivo emprender estas tareas.
“Nosotros respaldamos lo que hasta ahora el gobierno del presidente Felipe Calderón ha hecho, pero debemos de seguir trabajando con la fuerzas políticas mediante un combate frontal, porque este tema no debe tener distingo partidista”, dijo.
Anaya Cortés señaló que desde el Congreso de la Unión se debe fortalecer el marco jurídico para prohibir y establecer sanciones más severas a quienes hagan uso de la tortura en nuestro país.
El vicecoordinador del grupo parlamentario del PRD, Miguel Alonso Raya, dijo que, sin duda, la tortura se ha incrementado en nuestro país y el informe de Amnistía Internacional debe tomarse con seriedad, ya que es un organismo que no tiene “necesidad de mentir”.
“En esta estrategia contra el crimen organizado, indiscutiblemente se ha intensificado la tortura y las viejas prácticas de arrancar declaraciones; hemos insistido en el caso de Ejército, que llega a las comunidades y no pregunta quién vive y quién está, llega y entra, no pide permiso y ¿quién se puede resistir a eso?”, dijo.
El diputado perredista enfatizó que se requieren nuevos acuerdos con todas las fuerzas políticas del país y con el nuevo gobierno, que permita enfrentar de mejor manera al crimen organizado, y así terminar con los casos de violaciones a derechos humanos.
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