México firmó un acuerdo para establecer en su territorio una oficina de enlace y vinculación regional de la Organización de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), anunció hoy el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré Romero.
La oficina “le va a dar una proyección mucho mayor al trabajo conjunto de México con las Naciones Unidas y con Centroamérica”, comentó Poiré a Notimex vía telefónica desde Viena, Austria, aunque no dio fecha para su apertura.
En el marco de su participación en la Sexta Conferencia de las Partes de la ONU contra la Delincuencia Organizada Transnacional, destacó por otro lado que “un logro muy significativo de México es estar llevando a cabo reformas muy profundas que le dan al país una estructura mucho más sólida para alcanzar la seguridad”.
“Tenemos toda una serie de reformas constitucionales que amplían los derechos humanos de las personas y una serie de leyes que nos permiten combatir mejor fenómenos como la trata y tráfico de personas”, manifestó desde el lugar de la cita que se conoce como Convención de Palermo.
También nos permiten enfrentar delitos, agregó, “como el secuestro, así como (establecer) una mucho mejor coordinación entre los estados y el gobierno federal en el combate a la inseguridad”.
Destacó asimismo como un logro el de “contar con una policía federal mucho mejor capacitada y con buenos controles de confianza, mucho más amplia que la que teníamos hace seis años”.
“Hubo muy buena recepción al discurso que planteamos mostrando los avances de México en la materia”, dijo el secretario de Gobernación al destacar que era muy importante hablar de la estrategia nacional en contra de la delincuencia organizada y la estrategia de seguridad.
Reconoció que “en este entorno internacional nuestro país tiene mucho reconocimiento por el esfuerzo que ha hecho”.
“Desde luego fuimos claros en el sentido de que queda aún mucho por hacer y que tenemos que reconocer que quisiéramos avanzar más rápido en la reducción de los índices delictivos, pero las tareas están planeadas y la ruta claramente trazada”, enfatizó.
Expresó que entre los desafíos pendientes están reducir los índices delictivos, avanzar en la depuración de las policías estatales, y en el nuevo sistema de justicia penal. También, dijo, el debate “sobre las enormes ganancias generadas por los mercados ilícitos de drogas”.
México combate y combatirá a las organizaciones criminales, recalcó, pero pidió “una discusión amplia, responsable y coherente desde la perspectiva de salud, de seguridad, de libertades, respecto al origen fundamental de esta violencia que es la lucha entre organizaciones criminales por las ganancias ilícitas”.
El foro, apuntó, tiene un reto muy significativo en términos de una mejor coordinación entre los países participantes, alcanzar mayor implementación de los objetivos y una discusión sobre la participación de las organizaciones de la sociedad civil.
“México, a un nivel doméstico, ha tenido experiencias muy significativas y exitosas de participación de la sociedad civil en distintos formatos en el combate contra la delincuencia y la búsqueda de seguridad”, manifestó.
“Estamos convencidos que la participación de las organizaciones de la sociedad civil es indispensable para alcanzar la seguridad, porque son los ciudadanos, quienes son el objetivo último de cualquier estrategia en materia de seguridad”, consideró.
La Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada, que se firmó en Palermo (Italia), el 12 de diciembre de 2000, tiene carácter multilateral y consta de 41 artículos. En la actualidad cuenta con 147 signatarios y 93 ratificaciones.
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