EU tortura a mujeres migrantes en centros de reclusión

Foto: Vanguardia

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Al cúmulo de violaciones a sus Derechos Humanos (DH) que sufren mujeres migrantes durante su trayecto por México hacia Estados Unidos, se suman los maltratos e incluso torturas que les infligen los agentes migratorios norteamericanos al ser detenidas en el país vecino.

Así lo constató Cimacnoticias al entrevistar en esta urbe fronteriza del estado de Chihuahua a una mujer chiapaneca de 18 años que se encontraba en la Casa del Migrante de Ciudad Juárez, y quien fue repatriada recientemente de la localidad de Douglas, Arizona.

Esta mujer, quien permaneció durante tres días en un centro de detención en EU, junto a otros migrantes sin documentos, relató que salió de su comunidad para buscar una mejor calidad de vida para su familia, ya que solo obtenía trabajos con los que ganaba no más de 50 pesos al día.

La joven –que pidió se resguardara su identidad– narró que primero pasó cinco meses en el puerto de Mazatlán, en la norteña entidad de Sinaloa, para “juntar un poco de dinero” y luego trasladarse hasta Agua Prieta, en el estado de Sonora. Fue ahí donde cruzó hacia EU junto con otras personas.

Pero al llegar al país vecino, algunas personas que la apoyaron en el cruce la mantuvieron encerrada por algunos días en una casa junto con otros migrantes para después viajar a otros estados de la Unión Americana. Sin embargo finalmente fue detenida por las autoridades estadounidenses.

La mujer contó que durante su detención la alimentación dependía de los agentes migratorios, quienes le daban de comer cuando ellos querían. Además el lugar donde fue recluida, detalló, carecía de ventilación y no podía distinguir entre el día y la noche, por lo que perdió la noción del tiempo.

Maltratos

En una ponencia reciente, Dolores París Pombo, investigadora del departamento de Estudios Culturales del Colegio de la Frontera Norte (Colef), afirmó que cada año EU deporta a cerca de 400 mil personas a sus países de origen, y de ellas el 75 por ciento son de nacionalidad mexicana y sólo el 10 por ciento son mujeres.

No obstante, aclaró que tan sólo en el primer semestre de 2011 fueron deportadas unas 4 mil 600 mexicanas que llegaron a EU a través de ciudades fronterizas de los estados de Baja California, Sonora, Nuevo León y Tamaulipas.

París Pombo abundó que tras ser detenidas por agentes migratorios algunas mexicanas enfrentan maltratos, mala alimentación, falta de acceso a servicios médicos y temporadas largas de encierro.

El trato que reciben estas mujeres se añade al cúmulo de abusos y violaciones que sufrieron a lo largo del trayecto que recorrieron desde su comunidad de origen y al cruzar el territorio nacional.

Algunas migrantes detenidas en EU han acusado la falta de apoyo por parte de los consulados mexicanos, que –aseguran– hacen caso omiso de esta situación.

Según la investigación “Migrantes, desplazados, braceros y deportados”, coordinada por Dolores París, en 2005 el Departamento de Seguridad Nacional de EU empezó a aplicar la Operación “Streamline” en la frontera con México, con la que recurrió a la “cero tolerancia” para levantar cargos y encarcelar a las personas sin documentos.

El también investigador y especialista en temas migratorios del Colef, Rodolfo Rubio, advirtió que México tiene pocos argumentos para reclamar a EU la violación a los DH de sus connacionales, debido a que no le otorga un trato digno a las y los centroamericanos migrantes que atraviesan por nuestro territorio.

=LOA=

(CIMAC)