Maltrato infantil, delito “invisible” en el DF

En México no existen estadísticas, ni políticas específicas de atención al maltrato infantil Foto: No al maltrato infantil 1995

En México no existen estadísticas, ni políticas específicas de atención al maltrato infantil
Foto: No al maltrato infantil 1995

El maltrato infantil es un flagelo “invisibilizado” en esta capital, debido a la falta de estadísticas que permitan dimensionar el problema y de políticas y programas de atención especializados para las víctimas.

Así lo denunciaron especialistas y funcionarias durante el foro “Niñas, niños y adolescentes en contexto de violencia familiar, pobreza y exclusión social: un problema de salud pública”, realizado ayer en la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF).

Irene Delgado Pacheco, subdirectora de Prevención y Atención al Maltrato Infantil del DIF-DF, dijo que al año se reciben un promedio de mil 300 reportes por maltrato infantil, pero señaló que la cifra no refleja la cantidad real de niñas y niños víctimas, pues “es muy raro que se presente una denuncia”.

Agregó que en muchos de los casos los reportes no son presentados por las familias –y prácticamente en ningún caso por las y los menores de edad–, sino por personas cercanas que detectan las agresiones y llaman a los servicios del DF, pero es “difícil” dar seguimiento a los reportes y brindar la atención adecuada, pues los padres tienden a negar las agresiones.

Nashieli Ramírez Hernández, coordinadora general de Ririki, Intervención Social –organización defensora de los derechos de la infancia–, lamentó que la única posibilidad de intentar dimensionar el problema es a través de los datos de otras encuestas sobre violencia o dinámica familiar.

Puso como ejemplo la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh), que en su última publicación dio a conocer que aproximadamente en el 20 por ciento de los hogares capitalinos “no hay afecto”.

En ese sentido, Martha Itzia Flores Ramos, jefa de la Unidad de Atención y Prevención de la Violencia Familiar en la delegación Milpa Alta, señaló que otra forma en la que han logrado identificar y atender a las y los niños que sufren violencia al interior de sus hogares, es mediante las mujeres víctimas de violencia que acuden a los servicios de atención capitalinos.

“Podemos afirmar que si una mujer que es madre sufre violencia su hija o hijo también padecerá los efectos de ésta” –explicó–, ya sea a través de las agresiones físicas directas, pero también de violencia psicológica y al ser testigos de los ataques.

Por ello –enfatizó– es necesario que la atención a mujeres víctimas de violencia sea integral para su familia, pues sus hijas e hijos se exponen a reproducir o tolerar diversas formas de agresión.

La diputada de la Asamblea Legislativa del DF Poliminia Romana Sierra Bárcenas, urgió a la creación de políticas públicas desde “una visión de ciudad y nación” para proteger a la infancia y adolescencia, y abandonar la idea de legislar sólo para el sexenio o periodo legislativo.

Está comprobado –puntualizó– que las formas de maltrato, violencia e incluso abandono tienen un efecto en la salud física de las y los menores de edad, pues producen un aumento de cortisol (hormona liberada por estrés) que repercute en su desarrollo.

 

=AZM=

(CIMAC)