Niños deben recibir educación para proteger sus datos personales desde la enseñanza elemental: Ángel Trinidad Zaldívar

Foto: IFAI

A los niños se les debe educar, desde la enseñanza elemental, sobre la importancia que tiene el cuidar sus datos personales y los de las otras personas, propuso aquí el comisionado del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI), Ángel Trinidad Zaldívar, ante autoridades y expertos en privacidad de los cinco continentes.

Al participar en la 34 Conferencia Internacional de Autoridades de Protección de Datos y Privacidad (CIAPDP) “Privacidad y tecnología en equilibrio”, consideró necesario incorporar en los planes y programas de estudios de las escuelas, particularmente en las de enseñanza elemental, el tema de la protección de datos personales.

Para dar un ejemplo de la importancia que tiene el que las personas reciban educación en materia de protección de datos, comentó que el IFAI aplicó en los primeros meses de este año una encuesta, cuyos resultados revelaron que a un aproximado de 60 por ciento de personas no le incomoda o le incomoda poco que se divulgue cierta información personal, incluso aquella sensible, como las enfermedades que padecen, los medicamentos que toman, sus creencias religiosas o su origen racial o étnico.

Trinidad Zaldívar habló de otro reto que enfrenta México en materia de protección de datos, como la actualización que debe darse –opinó- a la regulación correspondiente al sector público, insertada actualmente en la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental.

Se trata, explicó, de un marco jurídico incompleto, dado que sólo acepta dos derechos, el de acceder y el de rectificar información personal en posesión de las dependencias y entidades gubernamentales.

En contraparte, dijo, existe una Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares, que reconoce los cuatro derechos ARCO (acceso, rectificación, cancelación y oposición), además de que establece diversos procedimientos y ejes rectores, entre ellos, un régimen especial para datos sensibles, con la posibilidad de sancionar con cárcel a quien haga un manejo ilegal de los mismos.

De este modo, la protección de los datos personales está más regulada en el sector privado, que en el público, pues la persona está colocada en el centro del derecho, en el centro de la tutela del mismo, reconociendo su dignidad.