Aunque hay un marco legal a favor de los niños, falta quién se responsabilice en asumir su protección: Margarita Zavala

Foto: Presidencia

Margarita Zavala, Presidenta del Sistema Nacional de Desarrollo Integral de la Familia (DIF), alertó que pese a contar con un marco legal en favor de los derechos de los niños, no hay quien se haga responsable de asumir su protección, por lo que el trabajo de la Red Mexicana de Cooperación Judicial para la Protección de la Niñez es una manera de decir, por parte de todos los tribunales, «nosotros nos hacemos responsables».

Y puntualizó que es fundamental proteger a los niños y a las niñas de casos de sustracción que los fenómenos de la globalización y los matrimonios entre nacionales “hace que estos temas de sustracción de menores sea cada vez más común”, lo que representa un hecho traumático para los niños y a veces lo trivializamos o minimizamos como adultos, esto en el marco de la inauguración de la Tercera Reunión de la Red Mexicana de Cooperación Judicial para la Protección de la Niñez.

Por su parte, el magistrado Edgar Elías Azar, presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF) señaló que el Estado no puede, ni debe, injerirse en la dignidad personal, ni imponer una moral particular, ni actuar por perjuicios.

Elías Azar puntualizó que nadie, sólo el tirano quiere injerirse en las vidas de las personas desde la fuerza del poder con prohibiciones y mandatos.

Asimismo, llamó a seguir impulsando los trabajos para configurar una legislación moderna en materia de restitución de menores, a fin de darle un marco normativo adecuado y viable a nuestras propuestas de acciones emprendidas.

Advirtió que la globalización ha modificado las relaciones familiares, y recomendó fortalecer la representación de las judicaturas locales para mejorar los mecanismos de protección y restitución de menores con una mejor y más amplia ínter actuación.

Mencionó que uno de los retos a vencer para lograr la unión a los movimientos internacionales en ese sentido y lograr una niñez mexicana que sepa hacia dónde va es tener funcionarios judiciales que no sólo cuenten con la vocación necesaria, sino con conocimientos especializados en los asuntos de los niños.