Foto: Senado.
Senadores del PRI y PVEM hicieron un llamado para replantear los objetivos de la lucha contra el crimen organizado y diseñar un marco jurídico que permita detener la violencia “que carcome nuestro tejido social”.
Al conmemorar ayer el Día internacional de la Paz en la sesión de este jueves, la senadora priista Mely Romero Celis expresó que “los mexicanos estamos cansados y a la vez aterrados y por esto hoy alzamos la voz demandando la reivindicación de la paz”.
Dijo los resultados de la “guerra” contra la delincuencia organizada, iniciada por la presente administración, “no han sido los esperados; por el contrario, sólo han generado un exacerbado crecimiento de la violencia a lo largo del país”.
“Los altos niveles de violencia que vemos día con día -resaltó- nos revelan que esta lucha simplemente ha fracasado”, pues prevaleció “la confusión en el rumbo, improvisación en la toma de decisiones e ineficiencia en la operación de los programas”.
Para erradicar este problema, dijo, es necesario que durante la siguiente administración se replanteen los objetivos de la lucha contra el crimen organizado a través de reformas legales.
Además, se requiere una restructuración profunda de las instituciones policiacas a nivel nacional e implementar mejores sistemas de control de confianza.
Para el senador Carlos Alberto Puente Salas, del PVEM, es evidente que nuestro país enfrenta un grave problema, por lo que el Senado tiene que diseñar un marco jurídico que nos devuelva al camino de la paz.
Afirmó que en el mundo hay experiencias exitosas de que una sociedad con seguridad, justicia y sustentabilidad sí es posible.
“Queremos un porvenir en el que las niñas, niños y jóvenes asistan a las escuelas para ser educados, donde se rescaten los espacios públicos para que practiquen deporte o realicen actividades recreativas”, expresó.
“No queremos -agregó- un futuro en el que los niños y jóvenes sean reclutados en las filas del crimen organizado, sino uno donde los recursos naturales sean protegidos y valorados y los recursos públicos sean invertidos para atemperar la desigualdad social y la pobreza y no simplemente en la compra de más armamento”.
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