El pleno de la Cámara de Senadores dio primera lectura al dictamen que reforma los artículos 5 y 8 de la Ley del Servicio Profesional de Carrera en la administración pública federal, para excluir de este sistema el cargo de director general o sus equivalentes.
Con ello, se menciona en el documento, se busca consolidar un Servicio competitivo y eficiente, pero “con la necesidad legítima que tienen los altos funcionarios para designar libremente a personas de su plena y total confianza en los niveles jerárquicos de dirección”.
Lo anterior, se agrega, permitiría impulsar “un verdadero equilibrio entre experiencia, conocimiento y lealtad con las políticas públicas del gobierno en turno al que la ciudadanía ha depositado su confianza en las urnas”.
En México, se enfatiza, se requiere que el puesto de director general sea nombrado por libre designación, ya que el Ejecutivo necesita servidores públicos que “garanticen confianza, responsabilidad y la celeridad que requieren las decisiones estratégicas en materia de planeación”.
En el dictamen, los senadores de las comisiones de Gobernación y de Estudios Legislativos, Primera, destacaron que la Ley vigente establece que al Servicio Profesional de Carrera se ingresa por medio de un concurso de selección y conforme al catálogo de puestos que comprenden, entre otros, el rango de director general, los niveles de ajunto o cualquier otro equivalente.
Sin embargo, en la actual administración dichas plazas “se han ocupado con base en el artículo 34 de la Ley, que crea una excepción temporal al concurso abierto por causa de fuerza mayor o por ocupación necesaria para puestos de áreas sustantivas o estratégicas, sin sujetarse al procedimiento de concurso establecido en la normatividad”.
Por este mecanismo, resaltaron los legisladores, “más de nueve mil nombramientos se llevaron a cabo de enero de 2007 a junio de 2008”.
Además, la Secretaría de la Función Pública informó que de 2001 a 2012 las plazas asignadas en la administración pública federal ascendieron de 554 mil 197 a 675 mil 266 y las de alto mando de director general de 588 a mil 213 en el mismo lapso.
“A través de convocatorias irregulares –subrayaron– se asignaron 600 plazas después del 1 de julio, quedando para el siguiente gobierno únicamente cinco mil 146”
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