Foto: Cencos.
En el Día Mundial de la Libertad de Prensa, el Centro de Comunicación Social, Cencos, recordó que México ha sido declarado uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer la libertad de expresión.
Según cifras del Centro, de 2009 a la fecha, han sido asesinados 30 periodistas por ejercer el derecho a la libertad de expresión, se han confirmado cuatro desapariciones, se han recibido 26 ataques con explosivos o armas de fuego contra instalaciones de los medios, insertos en un total de 527 agresiones.
«Entidades en el país viven silenciados, la prensa ya no puede informar libremente sobre acontecimientos que pueda tocar intereses ajenos», de acuerdo con el boletín del centro.
En Veracruz (zona golfo), cinco periodistas han sido asesinados en diez meses y un medio ha sido atacado con explosivos. Hoy se encontraron los cuerpos de Guillermo Luna Varela, Gabriel Huge, fotorreporteros de Vera News, y el reportero Esteban Rodríguez. El pasado 29 de abril en el mismo estado fue asesinada Regina Martínez, corresponsal de la Revista Proceso y quien cubría temas de seguridad.
«La violencia contra la prensa aumenta al mismo tiempo que la calidad democrática y la situación general de los derechos humanos se deteriora, quienes informan al respecto, ponen en peligro su propia integridad, la avasallante impunidad abre la puerta para que las agresiones se repitan y así crece el círculo vicioso de la violencia«.
El Centro de Comunicación Social pidió al estado mexicano no dejar a medias los esfuerzos contra las agresiones a periodistas. «Al no ser sancionadas las agresiones a la libertad de expresión se generan condiciones para la repetición de estos delitos».
Asimismo, pidió más capacidad y presupuesto para la Fiscalía Especial de Agresiones contra la Libertad de Expresión.
«En el marco de la impunidad estructural que padece México han surgido iniciativas para la protección; una por acuerdo institucional que no ha dado resultados claros para implementar medidas y recientemente la aprobación de la Ley de Protección a Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas que deberá ser avalada por la Presidencia de la República y posteriormente ser armonizada con las iniciativas existentes».
Asimismo, recordó que hay una agenda pendiente en materia de libertad de expresión y es una tarea fundamental ejercerla, promoverla y defenderla.
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