Las bancadas del PAN y del PRD en el Senado hicieron a un lado el Pacto por México y, con el respaldo de 60 legisladores, decidieron presentar ayer en forma conjunta una iniciativa de reforma política y electoral basada en 30 puntos.
Ernesto Cordero y Miguel Barbosa, coordinadores de esos grupos parlamentarios, aclararon que no están contra las “negociaciones en lo oscurito” que se hacen en el Pacto, pero el Congreso tiene que asumir a plenitud su obligación y derecho de construir leyes.
Rechazaron que sea un desafío a las dirigencias de sus partidos o se busque competir con el Pacto, al detallar que se invitará a PT, Movimiento Ciudadano, Nueva Alianza y al propio PRI a sumarse.
Precisaron que en seis semanas estará lista esta iniciativa, que se construirá con expertos, e irá al proceso legislativo con las que presenten quienes tienen constitucionalmente el derecho de iniciativa, porque el consejo rector del Pacto no tiene esa facultad.
La iniciativa de 30 puntos contiene reformas para crear los gobiernos de coalición con un jefe de gabinete, reconocer un cuarto nivel de gobierno a nivel constitucional, como son los gobiernos comunitarios; contempla la segunda vuelta y la reelección legislativa, darle autonomía al Coneval, independencia a la PGR; la eliminación del fuero, incluido el presidencial, así como la reforma política para el DF.
También proponen la fiscalización anticipada y durante la campaña de todos los recursos de partidos y candidatos; la pérdida de la candidatura y registro para el partido que rebase los topes durante la campaña; la nulidad de la elección; la destitución del cargo e inhabilitación del candidato para concurrir a la elección de que se trate, cuando el rebase se acredite concluidos los comicios.
Plantean sanciones penales por la transmisión de propaganda o publicidad encubierta; la revocación de la concesión de radio y televisión cuando el medio intervenga ilegalmente en las campañas electorales.
Además, obligar a los encuestadores a publicar y revelar la metodología, las fuentes de financiamiento y potenciales conflictos de interés con partidos, candidatos, gobiernos e intereses económicos o mediáticos, entre otros puntos.
Acompañados por los senadores Roberto Gil, Armando Ríos y Manuel Camacho, que serán quienes trabajen las iniciativas, Cordero y Barbosa subrayaron que es una agenda mínima y lo que hacen es cumplir con su deber.
“Estamos hablando con toda transparencia y claridad de una agenda que habrá de desarrollarse y consultarse con expertos, y que habrá de plasmarse en una iniciativa de modificación legal”, dijo Cordero.
Agregó: “¿Cómo llegan las iniciativas del Pacto? Pues son iniciativas trabajadas en lo oscurito que nadie conoce y de donde se envían a las cámaras y de donde se nos solicita, de la manera más atenta, que las aprobemos sin cambiarles un punto o una coma, sin escuchar a nadie y sin escuchar a l consejo de expertos. De modo que hay una gran diferencia, esto es como se debe enfrentar un proceso parlamentario con toda seriedad, de cara a la sociedad”.
Barbosa subrayó que el Congreso tiene que asumir a plenitud la obligación y del derecho constitucional de construir las leyes.
Se le preguntó si es un desafío a la dirigencia de Jesús Zambrano y replicó que el presidente de su partido jamás le ha pedido declinar a su obligación o derecho constitucional de legislar, por lo que el Senado arrancará con esta tarea y las demás iniciativas se agregarán al proceso de dictamen.
“Así es que ésta y otras signadas por quien tenga derecho de iniciativa. El consejo rector no tiene derecho de iniciativa. Quien tiene derecho es uno de sus integrantes, el Presidente de la República, y podrá ser acompañada con la firma de diputados y senadores… serán parte del proceso legislativo que nos llevará al producto que el Congreso mexicano alcance en este tan importante tema”, refrendó.
=AM. OB=
(Milenio.com)
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