Uno de los principales problemas sociales en México es la falta de tolerancia entre los integrantes de la sociedad. Esto, aunque parezca simple, puede desencadenar un sinfín de problemas, llegando a convertirse en situaciones de índole penal.
Por exiguo que parezca, la creación de estereotipos, la minimización o maximización de características de las personas y el trato desigual a individuos son parte del problema de la discriminación.
Según el Consejo Nacional para Prevenir y Eliminar la Discriminación (CONAPRED), ésta “es una práctica cotidiana que consiste en dar un trato desfavorable o de desprecio inmerecido a determinada persona o grupo, que a veces no percibimos, pero que en algún momento la hemos causado o recibido”.
Desafortunadamente, el hecho de no percibir la existencia de discriminación es un hecho que acrecienta la gravedad de este acto, pues quiere decir que la sociedad ha ido acostumbrándose a este trato, al grado de verlo común y hasta normal.
“Con esto, difícilmente los individuos actúan para erradicar dichas conductas; no tienen idea de que esto pueda ser castigado, pero deben saber que la discriminación es un acto actualmente penado en México”, comenta la Lic. Mariana Fuentes, especialista en Derecho Penal.
Hay grupos humanos que son víctimas de la discriminación todos los días por alguna de sus características físicas o su forma de vida. El origen étnico o nacional, el sexo, la edad, la discapacidad, la condición social o económica, la condición de salud, el embarazo, la lengua, la religión, las opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil y otras diferencias pueden ser motivo de distinción, exclusión o restricción de derechos.
Los efectos de la discriminación en la vida de las personas son negativos y tienen que ver con la pérdida de derechos y la desigualdad para acceder a ellos; lo cual puede orillar al aislamiento, a vivir violencia e incluso, en casos extremos, a perder la vida.
Para efectos de la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, se entenderá por esta cualquier situación que niegue o impida el acceso en igualdad a cualquier derecho, pero no siempre un trato diferenciado será considerado discriminación.
Por ello, para efectos jurídicos, la discriminación ocurre solamente cuando hay una conducta que demuestre distinción, exclusión o restricción, a causa de alguna característica propia de la persona que tenga como consecuencia anular o impedir el ejercicio de un derecho.
Durante el primer trimestre del 2013, la Ciudad de México y su área conurbada se presentó como la zona con mayor práctica discriminatoria, con un 68 por ciento del total de los casos.
Dado esto, el Distrito Federal cuenta con su propio organismo, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED), mismo que desde su creación, hace un año, ha trabajado para hacer valer la ley en contra de la discriminación en la capital.
El artículo 37, fracciones XXIII, XXXIV, XV, y los artículos 54 y 55, de la Ley para Prevenir y Eliminar la Discriminación en el Distrito Federal otorgan la “facultad y obligación del COPRED para conocer de las solicitudes de defensa por los hechos, acciones, omisiones o prácticas discriminatorias”.
Asimismo el Estatuto Orgánico de la Gaceta Oficial del Distrito Federal, establece en su título IV, de las atribuciones y competencia del consejo para atender quejas o reclamaciones, “señala atribuciones y competencia para atender quejas o reclamaciones, así como el procedimiento para su atención”.
El objetivo de COPRED es buscar «tocar el dolor de las personas que han sido discriminadas», asegura Jacqueline L’Hoist Tapia, presidente de la organización.
La población solicita ayuda
Durante los meses de enero a mayo, fueron 90 personas y una organización ciudadana quienes solicitaron la intervención de la institución, mediante comparecencia, llamadas telefónicas, vía electrónica y medios escritos.
Datos: COPRED
Datos: COPRED
Motivos y medios de discriminación
En su mayoría, el sector más discriminado es la población con alguna discapacidad.
Datos: COPRED
En cuanto a esto, las redes sociales, así como son un útil medio, se han convertido en una de las vías principales para la práctica de discriminación.
Dentro de éstas, el 26 por ciento de las personas abusadas fueron discriminadas por grupo, es decir, preferencia política, religiosa, étnica…; 19 por ciento sufrieron discriminación por género; 17 por ciento, discriminación por preferencia sexual; cuatro por ciento, discriminación laboral, y un 33 por ciento con ofensas entre conocidos, las cuales pueden no ser catalogadas como actos de discriminatorios; esto, mediante contenidos de texto, imagen y video, herramientas que hoy día la tecnología permite emplear.
De acuerdo con el artículo 206 del Código Penal, “se perseguirá por querella, a cualquier persona que:
I.- Provoque o incite al odio o a la violencia.
II.- Niegue a una persona un servicio o una prestación a la que tenga derecho.
III.- Veje o excluya a alguna persona o grupo de personas.
IV.- Niegue o restrinja derechos laborales.
Al servidor público que niegue o retarde a una persona un trámite, servicio o prestación al que tenga derecho, se le aumentará en una mitad la pena prevista en el primer párrafo del presente artículo, y además se le impondrá destitución e inhabilitación para el desempeño de cualquier cargo, empleo o comisión públicos, por el mismo lapso de la privación de la libertad impuesta”.
De la misma forma, considera que “no serán consideradas discriminatorias todas aquellas medidas tendientes a la protección de los grupos socialmente desfavorecidos”.
¿Cómo actúa el Distrito Federal?
Actualmente, la delegación con el mayor número de actos discriminatorios es Cuauhtémoc, debido, entre otros motivos, a la enorme afluencia de población.
Datos: COPRED
Ante esto, la intención de COPRED es crear convenios con cada una de las delegaciones de la Ciudad de México, con el fin de defender y proteger los derechos humanos, mediante un trabajo conjunto. Hasta hoy sólo las delegaciones Iztapalapa, Iztacalco, Magdalena Contreras y Milpa Alta son las inscritas.
Asimismo, propuso a diputados de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal reformas a la Ley para Prevenir y Eliminar la Discriminación del Distrito Federal (LPEDDF), así como al Código Penal del DF.
La sociedad y autoridades tenemos mucho en qué reflexionar y actuar. Si se requiere reformar leyes en distintas materias, es necesario comenzar con la concientización del trato entre los individuos que conformamos la sociedad. De esa forma, estaremos “en la misma frecuencia” y el éxito será alcanzado.
=Mónica Muñiz=
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