Foto: Semana a Semana
El 57 por ciento de las quejas por discriminación laboral que el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred) inició en 2013, corresponde a trabajadoras embarazadas.
Jacqueline L’Hoist Tapia, presidenta del Copred, presentó ayer el “Informe anual sobre casos de discriminación en la Ciudad de México 2013”, que da cuenta que para las capitalinas trabajar y estar embarazadas es motivo de exclusión.
En 2013 fueron atendidas por el Copred un total de 700 personas, lo que representa un incremento de 720 por ciento de la atención brindada en 2012, cuando el total fue de 97 personas. De las solicitudes de atención, 433 corresponden a mujeres lo que representa 60 por ciento del total.
La funcionaria explicó que no todas las solicitudes de atención corresponden a las competencias de la instancia, por lo que durante el año pasado sólo fueron calificados como presuntos actos de discriminación 165 casos, al resto se les brindó orientación o fueron canalizados a las dependencias correspondientes.
Fue así que fueron iniciadas 154 quejas y 27 reclamaciones. De las quejas iniciadas, 77 por ciento corresponde “a presuntos actos discriminatorios en agravio de mujeres”. Los principales motivos por los que son discriminadas las capitalinas son: el embarazo, el género y la apariencia física.
Y es que del total de quejas tramitadas (127), el 75 por ciento (96) corresponde a presuntos actos de discriminación en el trabajo, de las cuales el 57 por ciento se refiere a discriminación por embarazo; el 7 por ciento por orientación o preferencia sexual, y el 6 por ciento por razones de género.
A decir de L’Hoist Tapia, el repunte en las denuncias de discriminación laboral por embarazo se debe en gran medida a la campaña emprendida por la dependencia en octubre pasado llamada “Despido por embarazo: discriminación”.
Acotó que la discriminación no se limita a la segregación o despido por embarazo y que también se manifiesta en otros actos, pues en 2013 un total de 63 capitalinas presentaron una denuncia por hostigamiento laboral, que de acuerdo con la Ley Federal del Trabajo puede expresarse en conductas verbales o físicas.
Caso emblemático
En junio de 2013, Nora Beltrán Pacheco, ex trabajadora de la cadena de restaurantes Fisher’s, narró a Cimacnoticias la forma en que fue hostigada laboralmente a raíz de su embarazo, al grado de que se puso en riesgo su salud y la del producto.
Tras cinco meses de acoso constante para orillarla a renunciar, la joven fue despedida el 6 de junio del año pasado sin la liquidación correspondiente.
Nora contó que tuvo que tolerar que la sometieran a condiciones laborales de alto riesgo para su embarazo, con tal de no perder su empleo. Por ejemplo, dijo que la obligaron a utilizar tacones de 12 centímetros, cuando antes no eran parte del uniforme; la enviaban a atender las mesas del área de fumadores en un espacio cerrado, y le cambiaron el horario para que saliera a las 2 de la madrugada.
También le redujeron a la mitad el sueldo, ya que ganaba por horas y disminuyeron su jornada laboral, además de enviarla a sucursales donde las propinas eran mínimas y estaban tan lejos de su domicilio.
Ante casos como éste, la recién nombrada secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo del DF, Patricia Mercado, consideró que los actos de discriminación contra las mujeres en los centros de trabajo “se dan porque prevalece una gran ignorancia por parte de las empresas” sobre los derechos de las y los trabajadores.
Por lo que anunció que en su gestión promoverá convenios de actuación entre diversas dependencias y empresas, para lograr la adecuada capacitación de funcionarios y directivos empresariales.
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(CIMAC)
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